
Milei retomó la campaña en el conurbano y buscó polarizar: "Es un momento bisagra; abrazar la civilización o volver a la barbarie de los Kirchner"
El presidente Javier Milei volvió a ponerse al frente de la campaña, desembarcó en Tres de Febrero y buscó polarizar con el peronismo: 'Estamos frente a un momento bisagra: la posibilidad de abrazar la civilización y la libertad, o volver a la barbarie comunista de los Kirchner'. El líder libertario encabezó una recorrida junto a su principal candidato a diputado bonaerense, Diego Santilli, la ministra de Seguridad y candidata a senadora en CABA, Patricia Bullrich y el jefe del PRO bonaerense, Cristian Ritondo.
La visita fue en el distrito gobernado por Diego Valenzuela, quien se sumó a La Libertad Avanza tras dejar el PRO. En clave electoral, Milei hizo una alusión histórica con anclaje local: 'En este lugar, donde Urquiza derrotó al tirano Juan Manuel de Rosas, comenzaron a plasmarse las ideas de Juan Bautista Alberdi, que luego de treinta años de aplicarlas nos convirtieron en una de las potencias mundiales'.
"Estamos a mitad de camino. Les pido que sigan abrazando las ideas de la libertad. La Libertad Avanza o la Argentina retrocede. ¡A seguir al Colo y a Karen, que les vamos a ganar!', pidió.
El oficialismo eligió Tres de Febrero porque se trata de un territorio gobernado por un intendente libertario que garantizó un "escenario controlado" en medio de una campaña convulsionada por los incidentes y ataques de la oposición. La presencia de Milei apunta a reforzar la figura de Santilli como cabeza de lista y darle nuevo impulso a la militancia en los días clave previos a los comicios.
El objetivo del oficialismo es achicar la diferencia de más de 10 puntos que los separa de Fuerza Patria. Para eso, la estrategia de campaña apunta a aumentar la participación electoral, que en octubre fue del 60,98%. En ese sentido, en el Gobierno apuestan a que la presencia de Bullrich, una de las dirigentes con mejor imagen de la gestión, ayude a potenciar la campaña en la provincia, que representa casi el 40% del padrón electoral.
'Hubo mucha gente que no fue a votar y sigue habiendo muchos indecisos. Creemos que con eso tenemos mucho margen para recortar diferencia', analizó un armador cercano a Sebastián Pareja, presidente de LLA en la provincia. La estrategia incluye inundar las calles con afiches y mesas de militancia, ante la previsión de que el aparato peronista no desplegará la misma fuerza que en la elección anterior.