• 17/04/2023

El acto de Alberto Fernández en Benavídez volvió a exponer la cruda interna entre Julio Zamora y Malena Galmarini

La presencia del presidente Alberto Fernández en la localidad bonaerense de Benavídez volvió a exponer la dura interna que se libra entre el intendente de Tigre, Julio Zamora, y la titular de AySA y precandidata a sucederlo, Malena Galmarini. La enemistad entre Zamora y el massismo viene de larga data, tuvo varias réplicas en el Concejo Deliberantes y cuando se puede evitar se evitan. Y esta no fue la excepción.

Según pudo saber Conurbano Político, el intendente faltó al acto oficialista ya que "tenía los 50 años de una escuela icónica en Don Torcuato". Y efectivamente, Zamora estuvo en la escuela "La Reconquista" y buscó así despegarse del acto nacional en momentos en que la alta inflación horada la imagen de todo el que aparezca vinculado a la Casa Rosada. 

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Por otra parte, Zamora esquivó un encuentro agrio con Galmarini luego de las fuertes críticas que lanza contra su gestión municipal. El acto de Benavídez estuvo copado por funcionarios y dirigentes massistas como los concejales Micaela Ferraro, Francisco Fernández, Fernando Mantelli y Mayra Mariani. 

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El último mano a mano entre Zamora y Galmarini tuvo lugar en un acto encabezado por Alberto Fernández y Sergio Massa por la presentación de la Ley de Promoción de la Industria Automotriz en la planta de Ford en la localidad bonaerense de General Pacheco.

Julio Zamora se sentó en primera fila del acto junto al secretario general de Presidencia, Julio Vitobello, y se expuso al incómodo momento de recibir los aplausos del Massa y Galmarini durante su presentación. 

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Según le contaron a Conurbano Político de fuentes del massismo, el intendente de Tigre ingresó primero a la planta, mientras que el ministro de Economía junto a la titular de AySA y el presidente de Ford argentina accedieron minutos después. "Malena Galmarini se sentó en la primera fila con el Vasco (De Mendiguren) y lo saludó a Zamora, solo eso", indicaron los testigos del frío reencuentro. 

"Apenas terminó el acto, Zamora salió disparado y no hubo tiempo para algo más. Mientras que Malena se quedó saludando a los trabajadores y haciendo fotos", indicó a Conurbano Político una fuente vinculada al Frente Renovador. Esta vez no hubo oportunidad saludos de ocasión, la tirria entre ambos impide ahora simulaciones de afecto.