
El gobierno de Lanús cuestionó la medida de fuerza de los municipales: "Es un paro político promovido por el kirchnerismo"
El gobierno de Ramón Lanús cuestionó duramente la medida de fuerza de 48 horas del Sindicato de Trabajadores Municipales de San Isidro (STMSI). Manuela López Menéndez, jefa de Gabinete de San Isidro, afirmó que se trata de un "paro puramente político, promovido por el kirchnerismo".
Desde la intendencia amarilla deslizan que el conflicto gremial está fogoneado por la gobernación bonaerense. En particular apuntan al ministro de Trabajo de Axel Kicillof, Walter Correa, quien rechazó dictar la conciliación obligatoria. Las fuentes de la gobernación distrital le restaron relevancia al paro al indicar que tuvo una adhesión de 400 empleados sobre 6000 y los servicios municipales funcionaron con normalidad.
"El paro es puramente político, promovido por el kirchnerismo que negó la conciliación obligatoria, afectando a los vecinos por tratarse de un distrito que no los vota", sostuvo López Menéndez.
Desde la jefatura de Gabinete sanisidrense manifestaron que "la delicada situación de la caída del poder adquisitivo del salario municipal es una realidad que afecta a toda la Provincia de Buenos Aires y que no es ajena a San Isidro".
En esa línea, indicaron que el objetivo es recomponer la pauta salarial para que los empleados no pierdan contra la inflación: "Con las últimas actualizaciones para agosto y septiembre, el aumento acumulado del año queda en un 92,66%, se actualizaron las compensaciones por "horas extra" del personal, se terminaron las arbitrariedades en el pago de las mismas y se otorgaron dos bonos en enero y mayo, y en septiembre se suma uno nuevo".
El gremio exige un aumento inicial del 50% en dos cuotas, una en julio y otra en agosto. Sin embargo, desde el ejecutivo municipal persisten en ofrecer 15%, lo que elevaría el salario básico de los empleados a un promedio de $240 mil.