
Cernadas y Avancini tuvieron un feroz cruce en el Concejo Deliberante y profundizaron la división libertaria
Las diferencias entre las tribus libertarias quedaron expuestas esta mañana en una sesión que bordeó el escándalo tras un cruce entre los concejales Segundo Cernadas y Diego Avancini.
Ambos ediles, que el año pasado protagonizaron el primer experimento de unidad entre el PRO y LLA en un Concejo Deliberante, protagonizaron un fuerte intercambio cuando se debatía un proyecto para reducir tasas municipales a los comerciantes que quieran instalarse en Tigre.
La iniciativa de la concejala Sofía Bravo, integrante de La Libertad Avanza Tigre, fue rechazada sorpresivamente por el edil Diego Avancini, representante junto a Juanjo Cervetto del bloque de los libertarios desterrados del ecosistema mileísta por orden de Sebastián Pareja.
Avancini justificó su postura al expresar que el proyecto entraña "ambigüedad, falta de claridad y habilita a una serie de interpretaciones que alientan la judicialización". "El emprendedor que se radica en Tigre tendría beneficios, pero los que ya están acá quedan fuera de esta norma", cuestionó. "Apoyamos bajas de impuestos, pero siempre dentro de la legalidad y no cualquier cosa", remarcó.
Cernadas se mostró disconforme con la explicación y arremetió: "No entiendo que un concejal no esté interesado en traer nuevo empleo bajando los impuestos. Nos hablan de que está mal redactado o que no incluye a otros comerciantes, es una estupidez", reclamó.
"No se puede decir que resulta estúpido porque no se acompaña una propuesta, no nos consideramos estúpidos", replicó directamente Avancini tras la intervención de Cernadas escalando la tensión a un punto extremo. "No se trata de no acompañar un proyecto por una falta de una coma, pero este proyecto tiene errores graves de técnica legislativa", acusó Avancini contra el bloque de LLA Tigre.
Enseguida, Cernadas acusó a Avancini "de jugar la calladita" en comisiones y esperar la sesión para rechazar la iniciativa. "Ya tenía despacho de comisión, lo habían analizado el proyecto", afirmó. "¿Estamos trabajando para los vecinos o no? ¿Queremos bajar las tasas o no?", se preguntó visiblemente enojado. "No vengamos con chamuyo, terminemos con esta farsa", reclamó.
El concejal Mariano Pelayo pidió una moción para que el Concejo se convierta en comisión para debatir y bajar las tasas. "Definámoslo y bajemos las tasas ahora y no pongamos excusas", remarcó. La moción no alcanzó la mayoría y los ánimos quedaron aún más caldeados.
Ante esa situación, la edil Bravo señaló que "desde abril no se trabaja en comisión" y por eso ofrecieron constituir el recinto en comisión. "Nadie tiene ganas de trabajar, los miércoles no se trabaja y hoy tampoco se trabaja", afirmó. "Quedó claro quiénes queremos bajar las tasas y quiénes no", sostuvo.
Avancini pareció recoger el guante y sugirió "pasar lista en las comisiones y los días de semana porque hay gente a la que solo se la ve los días de sesión". ¿Seguirá la guerra libertaria que se desató por las tasas?